La tecnología cabalga a pasos agigantados. Las gafas google glass no son la excepción. Huelga decir que por un proceso progresivo o por la evolución del conocimiento especializado, llegamos a hallazgos y a resultados tan sorprendentes derivados de un proceso amplio de investigación o a veces por un efecto casual
Innovación y Google Glass
Siempre que alguna novedad sale al mercado nos planteamos qué fue antes, el huevo o la gallina, como bien plantea Montse Rius , que fue antes ¿El blog o los Perfiles Sociales?
Si seguimos la teoría de la Iglesia, sería la gallina.
Si seguimos a Darwin, seguramente, el huevo.
Ahora bien, hecho este inciso de entrenamiento para coger carrerilla, la tecnología y la curiosidad humana, han hecho posible esta evolución.
El de pasar de lo analógico a lo digital, sin apenas ruptura.
Recuerdo hace unos veintipico años decir: Ahora con los ordenadores se perderán puestos de trabajo.
Puede ser aceptable ese planteamiento, pero una cosa está clara,
Los cambios tecnológicos nos acechan
En la actualidad, estáis viendo los resultados de aquella afirmación, o en su caso, negación.
Puedo parecer friki, ahora, no me las doy de listo, sino que lo digo para que contrastéis el cambio.
Cuando lo planteé en hazlo tú mismo, iba por esa dirección: Hay que subirse al progreso y de hecho hay gente que lo está haciendo.
Es el caso de los móviles (smartphones) si lo tienes nada más que para los jueguecitos, no te gastes mucho dinero, sino cómprate el más barato.
Los teléfonos inteligentes tipo smartphone están hechos para más cosas.
Mira mi post sobre el uso del smartphone → Smartphones en el trabajo
Lo mismo del tendero que tenía el lápiz en la oreja, y le echaba saliva, para que hiciera el efecto acuarela y la escritura en el papel pareciera escritura de pluma, avanzamos muchos años para pasar al lápiz optico, y mira que casualidad: lápiz óptico y después las gafas.
¿Tendrán acierto las Google Glass?
Pasará como con la televisión, aquella canción-bolero de hace muchos años: La televisión pronto llegará, yo cantaré y tu me verás.
Derechos de foto: jessica mullen